Fuerza Gus

miércoles, 5 de diciembre de 2007

Almorzando con Soda Stereo

Vía el el Blog de la Rock&Pop nos encontramos con una interesante crónica escrita por Martín Ciccioli desde Venezuela.

Me encontré con Soda Stereo a las 12.15 del mediodía. Saldrían en varias combis rumbo al Hipódromo La Rinconada. En ese lugar Soda se volvía a presentar después de 10 años de ausencia. Había que salir con tiempo porque el tráfico estaba imposible. En Caracas el tránsito es mucho más caótico que en Buenos Aires. Llenás un tanque de nafta con solo 4 dólares. Primavera petrolera. Y el día se presenta complicado: cierre de la marcha antichavista: se esperan 400.000 personas en la calle. Nos espera un viaje largo.

Me subí en la combi de Zeta. Cada Soda se dirige en un vehículo distinto acompañado por respectivos asistentes. Más que una señal de frialdad oculta, parece un lujo de estos tiempos de regreso ancho. Se percibe buen clima.

Cuando llegamos al Hipódromo Gustavo ya está en el escenario. Mira la inmensidad del lugar en un día de 30 grados al sol. Estamos rodeados de montañas donde vive mucha gente humilde. Son los testigos de los barrios bajos chavistas que no pueden creer que en ese hipódromo de todos los días hayan montado ese escenario gigante con esas pantallas. Nadie se mueve.



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Adrián Taverna, el histórico sonidista hace sonar música por primera vez en el día por esos parlantes: Hay un monstruo en la laguna del Spinetta de Invisible. Después sigue con Despiertate nena de Pescado Rabioso. Gustavo mira como concentrándose en distintos puntos, estudiando la geografía del gran lugar.

En el campo vacío solo hay guardias de seguridad, muchos guardias. Charly se coloca en la batería y empieza a tocar ritmos de canciones de Soda. Gustavo escucha y pide la guitarra. Falta Zeta. Lo llaman. Aparece y Gustavo le pregunta: ¿qué tocamos?.
Suena Hombre al agua. A Gustavo no le gusta como suena la batería. Prueban solo para Charly y corrigen. El segundo inconveniente es el teclado de Tweety Gonzalez. No gusta su sonido para la parte de las cuerdas de la canción.

Tocan varios temas: Tele-ka, Imágenes retro, Juego de Seducción, Un millón de años luz y Signos. Daniel Kon, manager de la banda camina por el campo intentando escuchar como suena el grupo desde distintas posiciones. En el escenario Soda sigue con Corazón Delator y Danza Rota. Interrumpen con un chiste musical de gira: una versión de En mi cuarto de Vivencia con letra modificada y llevada para el lado del humor como aquel "Llamen a Moe". Gustavo se aburre rápido del chiste, es hora de ir a comer.

Lo hacemos en las carpas que están motandas a los costados del gran escenario. En una de ellas está casi todo el staff de Soda dividido en distintas mesas redondas como las de casamiento. Hay satisfacción porque en 48 horas lograron armar y desarmar el mismo escenario 2 veces en 2 países distintos. Nadie durmió. Logros de producción que no suelen salir en los diarios. El almuerzo es distensión absoluta. Gran variedad de comidas.

Clima de viaje de egresados. Gustavo es el primero en comer, hacer un par de chistes de sobremesa e irse. Zeta es un perro labrador que le mueve la cola a todo el mundo: se lo ve de buen humor intercambiando chistes con quien se lo cruce. Se nota que está disfrutando mucho este momento. Charly habla con asistentes sin perderle la mirada a su Blackberry. Se levanta de la mesa y compara su abdomen con el de Zeta. Tanta abundancia se ha depositado en algunos lugares de sus cuerpos. Lo toman con gracia. Leo García y Leandro Fresco están en otro sector en un equipo de Play Station donde en realidad se ve a Elvis Costello cantando. Ellos son como los niños del staff a pesar de que ya cruzaron la curva de los 30. Andan con una cámara de video grabando todo el tiempo todo los que los rodea: dicen que están armando un programa de televisión dentro de la gira.

El show está anunciado para las 21 horas. Son las 3 de la tarde. Vuelta al hotel para intentar una siesta. Vuelvo otra vez en la combi de Zeta, pero ahora grabo la conversación.


Fuente: Rock&Pop por Martín Ciccioli desde Venezuela.

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